jueves, 24 de diciembre de 2009

Cumpleaños de Lucas

Hoy es otro día especial, es el cumpleaños de tu amor y supongo que habrá una nueva fiesta en el cielo, en la que esta vez seas tu la anfitriona.

No tuve la suerte de conocer a Lucas, pero a través de ti y de Graciela he conocido su forma de ser y hasta me parece haber sido cercana alguna vez.

Con Graciela hemos compartido innumerables correos que han forjado una amistad muy especial, que nos ha enriquecido a ambas y nos une cada día.

Es por eso que también ha nacido un cariño por Lucas que nunca imaginé.

Hacen 26 años qué el se metió en la vida de los Ramoscelli, acontecimiento digno de recordarse con alegría y felicidad. Espero que Dios les entregue la fortaleza para rescatar lo más lindo de los años compartidos con Lucas y que esos sean los momentos protagonistas de este día especial.

Feliz cumpleaños Lucas, felicidades Graciela, Italo, Franco.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Caminos Vacíos

Nunca entendí muy bien esa frace "Caminos Vacíos". Nunca te pregunté por qué, qué significaba. Siempre esperé que fuera una ironía tuya, una irreverencia.
Lo cierto es que hoy sigue dando vueltas en mi cabeza esa duda y hoy pienso que a pesar de tu partida nos dejaste el camino lleno de tu presencia.
Tanto que es imposible no recordar con alegría que hacen 27 años abriste los ojitos por primera vez en este mundo y llenaste nuestras vidas de tu pequeña compañía. Fuiste capaz de atrapar nuestra atención con tus travesuras de niña, de adolescente y de joven hermana, hija, prima,sobrina, amiga y cómplice.
Cómo será tu cumpleaños con los angelitos? Siempre sueño con que tu vida sea feliz hoy. Si Dios quiso llevarte con tu amor, también pienso que lo hizo para eternizar el amor que los unía. Por eso no me cabe duda que Lucas debe ser el anfitrión en esta fiesta.
Que Dios los bendiga y los tenga disfrutando de la alegría que siempre nos proyectastaron.
Siempre te amamos y recordamos con cariño, más aún en este día tan especial.
Recibe un beso inmenso de todos nosotros.
Feliz cumpleaños hermanita hermosa.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Correspondencia


Todo permanece cerrado y custodiado en las cajas de archivo que luchan por no caer de los estantes cuando uno abre sus compuertas.

De pronto acude la curiosidad en un viernes lluvioso a la tarde, con el cielo inmensamente gris y a punto de estallar todavía más.

En el silencioso devenir hay tiempo para hojear antiguas correspondencias que permanecerán vigentes para siempre.

Hay muchos sobres de color blanco - incluso otros de color marrón -. Cada uno de ellos contiene en su interior algunas hojas. La tinta que predomina tiene el color negro. Abundan en su contenido las comillas y los signos de admiración. También los puntos suspensivos y alguna que otra pregunta que el tiempo quizás se encargue de responder a su momento.

Ella hablaba de su felicidad al lado de él. Contaba, también, que no lograba salir de su asombro por lo maravilloso de la vida. El mensaje tenía la impronta de quien se siente en la obligación genuina de difundir y compartir que es posible hallar grandes caminos.

Por la ventana me quedo mirando, pensativo, como si tuviera la certeza de que esa carta me estuviera interpelando. Sin lugar a dudas, no eran letras; eran voces. Voces que me invitan a seguir viviendo.

martes, 20 de octubre de 2009

Pasos

En la extensa caminata hubo tiempo para conversar, meditar, contemplar. Los paisajes de la natualeza, hecha metáfora de la inmensidad, alimentaron una sensación inevitable: que algo más debe haber entre nosotros.

Para algunos, pueda que sea sólo una ilusión. Para otros, quizás sea parte de una realidad a la que el ser humano accede parcialmente.

Por mi parte, elijo la última opción. En definitiva, es la que me permite estar cerca de los chicos y aprender que la vida es un instante y todos los demás.

lunes, 28 de septiembre de 2009

Algo más que una creencia

Mandé un mensaje atravesando las distancias más lejanas. Conté acerca de una buena nueva que estaba viviendo. Recibí respuesta y, de paso, una yapa: la reflexión de que seguramente María y Lucas estarían contentos, donde quieran que estuvieran, acerca de nuestros propios sucesos.

Asentí en el bar, ya aconteciendo las primeras luces de la noche; creyendo, una vez más, que es imposible explicar la convicción de un sentimiento genuino y sincero, sobre todo cuando hay ciertas ideas que conducen a otras de índole metafísica.

lunes, 31 de agosto de 2009

En eso estamos

Confieso que desde lo que sucedió con ellos no dejo de pensar a cada instante sobre el sentido de la existencia. Digamos que siempre conviví con muchas preguntas afines sin resolver, pero nunca antes asistí a una inquietud tan poderosa, que me trascendiera tanto y hasta impactara de manera directa e inmediata sobre mi subjetividad.

El universo, necesariamente, es diferente para mí. De ninguna manera podría ser igual. Eso no me genera grandes sorpresas, por el contrario, puedo considerarlo como algo esperable de mi parte. Lo verdaderamente llamativo, lo curioso, lo fuera de lugar o de lo común es lo que contribuye a cultivar un misterio que sólo lo entiende a su manera el que lo vive. Uno sabe que hay gente que deja de habitar este mundo, pero lo comprende de otra forma cuando un ser querido y cercano se encuentra ante esa realidad.

Me quedo pensando en todas estas cosas. Me intriga saber qué pensaría María ante una situación de esta naturaleza. Según lo que pude conocer acerca de su manera de pensar, sentir y comprender, según sus charlas con el sol o la luna de testigos, trato de imaginar posibles respuestas, pero no es lo mismo. Entonces me quedo con la duda, con el suspiro contenido, con mi mirada perdida en la luz que entra por la ventana.

Ni idea qué podría decirnos ella. O sí: "Vivan", supongo-quizás-seguramente.

martes, 25 de agosto de 2009

Un día como hoy

Cada vez que antes de mis sueños más profundos miro al estante que se ubica frente a mí, puedo ver a aquella caja que, para un día como hoy, me mandaron a modo de obsequio. Tiene tu letra señalando el remitente y el destinatario. Tiene regalos. Tiene una carta tuya y ese cuento que una amiga en común nos escribió.

En días como los de hoy no dejo de pensar que tu presencia me sigue acompañando. María, gran amiga, siempre te siento muy cercana y ése sí que es un muy lindo regalo.

lunes, 17 de agosto de 2009



La tierra sigue girando alrededor del sol y se viene otra primavera. La lluvia y el viento han ido puliendo las asperezas de la vida y si bien quedan las grietas de la pena, el vendaval ya pasó y quedan los maravillosos recuerdos de cuando el camino era liso y sin escollos.

No quisiera recordar cómo fue el gran tropiezo, no vale la pena detenerse en ese punto tan terrible, quiero ir más atrás, cuando uno pensaba que las desgracias le ocurren a otros, en plena ingenuidad de la existencia.

Ella también creo que lo creía así, espero nunca se haya imaginado siquiera que sería la primera en partir.

Siempre recuerdo la tibieza de sus manos suaves, sus largas pestañas de niña malcriada, su risa contagiosa y su vos la tengo pegada en mi oído, la pienso y la escucho como si estuviera conmigo.

Cuando era pequeñita la hacía dormir con cuentos o canciones, nunca fui buena para cantar, pero a ella le gustaba escucharme, había que salir despacito para que no se despertara, sino se levantaba mañosa y quien la aguantaba…

Me asusta que pase tan rápido el tiempo, pero a la vez se que es el remedio más efectivo para transformar las penas en una nueva forma de vivir, y para aprender a buscar en las grietas la dulzura de la vida.

Te quiero hermana, recibe mi abrazo, donde quiera que estés.

lunes, 20 de julio de 2009

Amigos

Hoy es el Día del Amigo. Me gusta que, al margen de cualquier connotación comercial que se le pudiera objetar a la fecha, haya un día especial destinado a quienes forman parte de nuestra vida.

Uno forma parte de los amigos. Los amigos forman parte de uno. En esa continua intersección de subjetividades suceden las anécdotas y subyace la presencia.

En días como hoy suelo pensar un montón de cosas. Sin ir más lejos, estar escribiendo algo en este espacio se da porque alguna vez viví en Bahía y conocí a amigos que ni el tiempo ni las circunstancias ni nada me impedirá tener presentes; y me tomo el atrevimiento de sostener que este sentimiento involucra a muchos.

Sé que María tenía (tiene) muchas amigos y amigas que conoció en muchas etapas y circunstancias de su vida. Supe que Lucas, a quien había conocido de vista hacía un par de años y con quien no tuve la oportunidad de entablar una relación cercana, también. Sin embargo, siento que de alguna manera lo fui conociendo. A través de María, claro; y a través de un montón de testimonios.

Hablando de María, hoy tengo ganas de saludarla y de darle un abrazo, sintetizando en esa intención la manera de poder estar todos sus afectos juntos.

En esta ocasión aprovecho simplemente la oportunidad para brindar un gran saludo y un fuerte abrazo para todos, especialmente para las amistades y los familiares de María y de Lucas.

miércoles, 15 de julio de 2009

Invierno

El otro día alguien me mandó un mensaje diciendo que los inviernos en Bahía no dejaban de tener esa particularidad de dejar huérfanos a quienes allí se quedan, sin tener la oportunidad de poder, siquiera, compartir el mate.

Desde la distancia geográfica y temporal en la que me encuentro puedo dar cuenta de aquéllo; y mientras más transcurre el tiempo más certezas tengo de que si para muchos de nosotros Bahía fue un momento inolvidable en nuestras vidas fue por la posibilidad de hallar gente única y maravillosa que fundamentó cada día, cada instante, cada circunstancia por más efímera e intrascendente que podría haber llegado a ser.

Los chicos - ella y él, para ser más precisos -, seguramente hubieran adherido a esta idea o, como mínimo, la hubieran entendido en virtud de quienes fueran capaces de expresarla.

viernes, 19 de junio de 2009

Como todo los días

Yo, en estos días y casi como tantos otros más, sentí la enorme necesidad de poder hablar con María; comentarle algunas situaciones, actuales y no tan actuales. Cosas de la vida, así, lisa y llanamente. Todo tiene que ver con la vida, hasta lo que no es. Por eso quería verla, sentarme a tomar algo con ella, a la tarde, preguntarle por sus días, contarle de los míos, conocer su opinión ante mi presente más continuo e inmediato.

(Me pregunto si existirán los diálogos silenciosos; supongo que sí. Y si así fuera, qué va: entonces significará que nunca hubimos dejado de dialogar).

... De cualquier manera, insisto: hay veces que, releyendo sus cartas, sus mails, recordando sus palabras, siempre trato de proyectarlas como para reconstruir lo que ella me manifestaría en tal o cual ocasión; porque estoy convencido de que por más que las personas cambien o no con el tiempo a raíz de sus experiencias, hay algo que queda y que no se pierde; y que si está a punto de perderse, otros acudirán a su rescate. A eso que por siempre permanecerá entre nosotros podremos llamarle esencia o como queramos; porque a esta altura de las cosas, lo mismo da si la cuestión pasa por ser claro para transmitir las ideas que nacen en nuestro interior.

martes, 19 de mayo de 2009

Una canción

Una vez María me regaló un disco con un compilado de canciones de Liliana Felipe. Me iba, ya me marchaba para dejar Bahía; y antes de partir, de emprender esa retirada tras haber conversado animadamente con ella, llegó su obsequio. Me aseguró que me iría a gustar; a los pocos días me preguntó si efectivamente había sido así. Mi respuesta fue afirmativa.

Ocurrió un 1 de febrero de 2008. Ese día, sin saberlo, fue la última ocasión en que la vi; pero no la última vez en que la sentí cerca. A diario se renuevan esas conexiones que yo entiendo como metafísicas. Cada vez que escucho ese disco que me regaló, me acuerdo de ella y de todas esas amistades que tuvimos la feliz oportunidad de cosechar.

Para compartir, dejo la letra de una canción que habla sobre el amor, los afectos, las historias imposibles y un montón de situaciones que han sido temas recurrentes para María y muchos de sus amigos. Que la disfruten.



A NADIE

Qué cosa es el amor,
medio pariente del dolor,
que a ti y a mí no nos tocó,
que no ha sabido, ni ha querido, ni ha podido
por eso no estás conmigo...

Porque no nos conocemos y tampoco nos queremos,
porque nunca te he mirado ni despiertas a mi lado,
porque no sé si te gustan como a mí las milanesas,
porque no sé dónde vives, ni con qué las aderzas,
porque puede que te falte entusiasmo antagonista,
porque puede que te sobre moralina y seas panista.

Qué cosa es el amor,
medio pariente del dolor,
que a ti y a mí no nos tocó,
que no ha sabido, ni ha querido, ni ha podido
por eso no estás conmigo...

Porque no nos conocimos y en el tiempo que perdimos
cada quien vivió su parte, pero cada quien aparte,
porque no puede apagarse lo que nuca se ha encendido,
porque no puede ser sano lo que nunca se ha podrido...

Porque nunca entenderías mis cansancios, mis manías,
porque a ti te dio lo mismo que cayera en el abismo,
este amor que despreciaste porque nunca me buscaste,
donde yo no hubiera estado, ni me hubiera enamorado...

Qué cosa es el amor,
medio pariente del dolor,
que a ti y a mí no nos tocó,
que no ha sabido, ni ha querido, ni ha podido
por eso no estás conmigo,
por eso... no estoy contigo.

domingo, 26 de abril de 2009

Memorias de una visita


Villa Regina late. En el sentimiento profundo, en el recuerdo intacto, en la memoria fiel. En la presencia de un día como hoy, alto en la cumbre, con la panorámica mirada posarse sobre el fulgor de una ciudad que desde entonces remite al soplo de un aliento vital que nunca perderá vigencia.

Caminantes fuimos, uniendo sendas sin abandonarnos en esa iniciativa. El mapa vinculó tierras separadas y las convirtió en un solo encuentro con connotación de inolvidable. De tarde, de noche, de madrugada. También hubo amanecer con suaves golpes en la puerta a la hora en que el gallo canta; y un desayuno entre susurros silenciosos, mientras los ojos se perdían en la contemplación de imágenes que colgaban de las paredes. Como si allí nadie faltara.

Pasos y más pasos matizaron una jornada que por lo emotiva pasaría a formar parte de esos instantes preciados y significativos que otorgan a la vida el carácter de aura y misterio. Entre calles de tierra, árboles y barrancas, marchamos juntos; compartiendo nuestras circunstancias como si nunca nos hubiéramos apartado de ese estado de naturaleza que nos remite a la infancia.

Vida, siempre vida. Alrededor de una mesa, comiendo empanadas, recitando anécdotas, jugando con pequeñas piedras en el río, dándonos cuenta de que todos los momentos bien podrían reducirse nada más ni nada menos que a uno solo.

Si lo sabrá el indio, testigo predilecto de nuestra visita, que desde su omnipresencia busca obstinado hasta descubrir en las alturas certezas que en el llano no podrá encontrar. Como nosotros, que todavía hoy gustamos en alzar la vista en dirección al horizonte, donde seguramente hallemos argumentos para no detener el rumbo hacia algún distrito con aroma a porvenir.

jueves, 19 de marzo de 2009

carta escrita por cecilia mellado, leida por graciela. tambien durante el acto del 16 de marzo del 2009

palabras de Adriana Rodriguez, a un año del asesinato

video hecho por Chelo Candia. imagenes del mural en homenaje a los chicos. musica de Cienfuegos


http://www.chelocandia.blogspot.com/

Luchando, después de un año sin justicia para Lucas y María



- ¡Hola!
- Che nos atropellaron a la Morocha.
- ¿Qué? Pero… ¿como esta?
- No, no. Nos mataron a María.
- Nooo… ¿y Lucas? ¿Donde esta?
- Iban juntos cruzando la calle también esta muerto.

Un año paso de aquella puta mañana. Un año y nosotros acá.
Quizás lo que espera el morbo es que contemos nuestro dolor. Mirarle los ojos, tomarle el pulso. Si es posible robárnoslo para hacerle radiografías ecografías, sacarle sangre…

Pero, no. No será así.

Eso es sólo un instante que nada puede hacer contra los años que vivieron los chicos.

A los dos días de aquel 16 de marzo, después de llorar sin que se mitigue en nada nuestro dolor, comprendimos con la ayuda de María y Lucas que lo mejor que podíamos hacer era recordarlos. Y aparecieron los recuerdos de los pibes y se adueñaron de nuestro dolor y le dieron la forma que ellos querían.

Ese día, no abrió un abismo en nuestras realidades, sino un infinito que no puede ser sino bello. La ausencia es tremenda, trágica, ningún adjetivo alcanza para decirlo. Pero ellos no están ausentes, desde lo que fueron se nos vienen todo el tiempo a acompañarnos, a no dejarnos jamás sólos, y sobre todo a divertirnos. Sus chistes, sus bromas, están dando vuelta alrededor nuestro.

Cuando alguien nos nombra a Lucas y a María, la cara se nos llena de alegría, y nos desesperamos por contarle mil anécdotas divertidas, o contarle los libros que leían, la música que escuchaban, los papeles que pegaban en sus casas. Desde allá atrás, un año atrás, ellos están con nosotros cada día. Está cantando la Morocha canciones de Liliana Felipe, el Lucas diciendo, respetando el tono de voz por supuesto, capítulos enteros de los Simpson. Hay chistes que lo hacemos para ellos. Imaginando su risa, sus carcajadas…

Un año con ellos. Como el día que Graciela nos invitó a la misa que se hizo en honor a los chicos. Jamás pudimos concentrarnos en ese lugar absolutamente ajeno a nosotros, pensando como se estarían cagando de risa los pibes desde donde estén. Están con nosotros en el parquet, en las aulas. Están siempre están.

También están para decirnos que hay que seguir luchando. Para indicarnos cuáles son los problemas. No nos permiten bajar los brazos. Nos invitan obligándonos a pensar y actuar. Porque ellos lo comprendieron siempre.

Por eso marchamos, por eso reclamamos. No lo hacemos por venganza, ni por sacar a pasear nuestro dolor por las calles. Lo hacemos porque sabemos, porque ellos lo sabían, que si no se hace algo va a haber mil accidentes más como el de los chicos. Y mil dolores más. Y mil marchas más. Y mil monolitos más.

No los vamos a perdonar, ni estos ni ningún otro muerto por este motivo. Porque el 6 de marzo atropellaron a una chica, que quiso el destino que algunos de nosotros la conociéramos, en el mismo lugar donde asesinaron a María y a Lucas. ¿No nos escucharon durante un año reclamando y denunciando que iba a volver a pasar?

Lo decimos devuelta, ahora: Sino se hace algo va a volver a pasar. Se tiene que hacer y ya.

María y Lucas, son más que un estereotipo de víctimas del tránsito. Se los puedo asegurar. Son nosotros. Nosotros marchando. Nosotros sonriendo. Nosotros recordando. Nosotros no olvidando y no perdonando.

María y Lucas estarán siempre en nuestras manos, en nuestros gestos, en nuestro pulso…

Amigos de Lucas y María

16 de marzo 2009, Bahía Blanca

martes, 17 de marzo de 2009

Vivir en los otros

El tiempo es una rueda mágica. Gira el mundo alrededor del sol y no para de girar. Será así hasta el final de los días, cuando ya no quede nada, y entonces llegue el momento - si es que ocurre alguna vez - de que podamos comprender todo ese intrigante misterio que rodea a la existencia.

Desde aquel fatídico 16 de marzo, fecha grabada a fuego en cada uno de nosotros, no hubo un solo día en que no me preguntara sobre esas ausencias que ya no pueden despertar a la presencia como así lo hacían antes, cuando dibujaban la vida de las personas que a su lado transitaban esos caminos que de ninguna manera eran vacíos.

Se sabe que, para muchos, hay otros tipos de ser y estar; un desglose en dos mundos que nos hace creer en la posibilidad de una trascendencia que no podemos comprobar fehacientemente - al fin y al cabo, se celebra que la ciencia no corra para este tipo de argumentos - sino percibir o sentir de algún modo.

Ahora bien, a veces suelo preguntarme si estar vivo es otra cosa como, por ejemplo, participar de la memoria de otra persona. Cuando uno piensa en alguien quizás lo haga porque ese alguien está también pensando en uno. Y vivir en el pensamiento y la emoción del otro es, acaso, la mejor manera de dignificar a la existencia.

Porque viven en nosotros y nosotros vivimos en ellos, María y Lucas serán siempre parte de nuestro presente.

lunes, 16 de marzo de 2009

Te extraño

Siento que me faltaron abrazos, palabras, cariños, te quiero, momentos, mates…

Te fuiste tan rápido que todo fue poco, ni siquiera pude conocer al amor de tu vida, no pude ver tus ojitos entretenidos con los suyos, no pude apreciar esa complicidad, esa simplicidad que los unía.

Hoy me lamento de todo lo que me perdí. Quisiera detener al tiempo y hacerlo girar al revés. Pero ya ha pasado un año de que se fueron y parece que sólo fue un horrible suspiro.
No quisiera recordar eso, pero el subconsciente traiciona y a las 5:15 horas de hoy desperté soñando con vos.

Buscando excusas para no recordar lo feo, intento convencerme de que estás tan feliz con Lucas por allá arriba, cerca del cielo, que no vale la pena ponerse triste por tu ausencia, más aún, es un acto de egoísmo la angustia, sólo hay que estar contenta porque la nueva vida que llevan es lo que buscaron siempre.

También me conforma el imaginarte como un fantasmita a mi lado, velando por nuestros sueños y tratando de hacernos más lindos los días por acá. Siempre busco señales de tu presencia y aunque nunca he tenido ninguna concreta, sí juego a que estás cerca.

Hermanita, no he dejado de extrañarte en todo este tiempo que no nos vemos, el tiempo no ha sido suficiente para borrar esos lindos recuerdos que dejaron en mi tu paso por la vida.

Siempre te quiero, siempre te necesito y siempre quiero que seas feliz.

Con mucho amor.

Tu hermanita.

lunes, 16 de febrero de 2009

Aquí y ahora


Nunca seremos capaces de olvidar
lo que pasó;
mucho menos a ustedes,
amigos de muchos de nosotros
e inseparables compañeros
de quienes todavía seguimos
esperándolos.

martes, 6 de enero de 2009

Con mucho cariño

Extraño tus mensajes a cualquier hora,
para contarme lo más importante
o lo que se presume un detalle.

Extraño tus reflexiones,
también tus risas
y la comunicación diaria/recíproca.

Extraño nuestras charlas únicas,
el sentido de la vida
y el abrazo sin distancia.

Sé que no
que no es es extraño

que te extrañe

¿Por qué,
por qué,
por qué será?

-...Porque lo que se quiere no se olvida.